Después de llegar al departamento, tuve mi primer acercamiento a la comida, ya que nos llevo una pizza de tres quesos, que cabe mencionar que era un queso, o bueno tres quesos con un sabor bastante fuerte, por lo que se imaginarán el sabor que tenía aquella cosa. Ese día la pasamos bebiendo hasta más no poder, ya saben, probando el producto nacional, y con producto nacional me refiero a alcohol, no a europeos, quizá eso fue después.
Al día siguiente por fin pude dar una vuelta por la zona, ya que me mostraron las hermosas calles de Nancy Ville en donde podías encontrar tiendas de todo tipo, ya saben, de ropa, maquillaje, comida, vinos, y sobretodo habían bares en cada esquina.
El metro en Nancy es como si fuera el trolebús en México por eso de la electricidad, es diferente al metro en París.
Posteriormente, es decir, al tercer día en Nancy, ya pude salir sola y bueno, era hora de buscar la lavandería y un mercado o algo similar para comprar la comida y claro, para conseguir más bebida, así que salí en compañia de una valedora a comprar cosas y a comer; pero en vista de que era la primera vez que salíamos solas por esas calles, obviamente nos perdimos, por lo cual pudimos conocer varios lugares.
Plaza Stanislas en Nancy Ville.
Después de ir a dejar a la otra valedora a la Gare de Nancy para que se fuera a Milán, nos dispusimos [mi cuate que vive en Francia y otro valedor] para ir a comer y hacer otras cosas divertidas como ir a bares y esas cosas.